








Resulta que mi chico tenía unas ganas tremendas de ir a pescar de noche y quedarnos allí. Por A o por B nunca podíamos quedar, hasta que un día pudimos. Obviamente ni E ni mi hermano estaban ese día con nosotros, de otra manera no hubiéramos ido.
Me gustó mucho la experiencia, aunque no aguantara despierta toda la noche y me echara una siesta de 5 horas de madrugada, estuve pescando de diferentes maneras y vimos anochecer en el puerto junto al faro, algo muy chulo.

¿Tú qué opinas?