La magia del orden por Marie Kondo. Hace poco me interesé por este libro que tantas ventas ha tenido. Más de 2 millones de ventas en japón y por aquí otros tropocientos. Uno de los libros de No ficción más vendidos en España el día de St Jordi.
Contenidos del artículo
- 1 Marie Kondo describe en muchísimas ocasiones los síntomas de un Trastorno Obsesivo Compulsivo
- 2 Marie Kondo se atreve a dar datos poco – o nada- científicos sobre lo que provoca su método
- 3 Marie Kondo se pasa medio libro vendiendo su método
- 4 Después de aplicar el filtro al método KonMari
- 4.1 Deshacerse de todo lo que no usas, no te gusta o no sabes por qué has guardado
- 4.2 El orden por el cual debes deshacerte de las cosas y ordenar
- 4.3 Ordenar por categorías, no por ubicaciones
- 4.4 Cada cosa en su sitio y un sitio para cada cosa
- 4.5 No existe una persona que le guste más el caos que el orden
- 4.6 Artículos Relacionados
Este libro nos habla sobre un método de organización del hogar llamado el método KonMari, con el que , asegura Marie Kondo, solo ordenaremos una vez en nuestra vida, para luego preocuparnos unicamentede limpiar y disfrutar de un hogar en armonía, ordenado y que resplandece de felicidad.
Suena idílico ¿Verdad? Me animé a leerlo tras descubrir opiniones muy positivas sobre este método. El resultado ha sido decepcionante por una parte y un tanto revelador por otra. Sin embargo a mi forma de entender este método creo que deja mucho que desear y tiene unos cuantos detalles que de verdad considero muy exagerados e inútiles.
Un claro motivo por el que NO puedo recomendarte este libro es por su extensión. De unas 190 páginas que tiene este libro, me quedaría con unas 50. El resto son paja, y te explico por qué.
Marie Kondo describe en muchísimas ocasiones los síntomas de un Trastorno Obsesivo Compulsivo
En su libro nos cuenta cómo empezó a interesarse por el orden y la decoración a eso de los 5 años de edad y cómo se obsesionaba con tener su habitación, su casa y hasta su aula, en completo orden. Nos cuenta que luchaba por conseguir un orden completo pero que sentía que nunca lo conseguía, siempre seguía sintiéndose incómoda y hasta llegaba a tirar objetos de sus familiares a escondidas, basándose en justificaciones del tipo «nadie se dará cuenta» , «no lo echarán de menos porque no lo necesitan» o «le estoy haciendo un favor».
Ella misma afirma que ha tenido mejor relación afectiva con los objetos que con las personas y que lleva desde su infancia probando métodos de organización que llegaran a mantener de forma automática el orden por que si no en contrabando el hogar en orden se sentía muy frustrada.
En conclusión; Marie Kondo se ha pasado prácticamente toda su vida ordenando para sentirse bien.
Esto significa que ha basado su bienestar y su felicidad en cosas materiales, en rituales (dar las gracias a los objetos que deshecha por haber cumplido su función, dar las gracias a sus calcetines o medias por haber «trabajado» todo el día por su bienestar, entrar en casa y decirle -a la casa- que ya ha llegado y se siente feliz por eso…etc) y en muchos más detalles que demuestran con bastante evidencia que probablemente padezca un TOC.
Marie Kondo se atreve a dar datos poco – o nada- científicos sobre lo que provoca su método
Se basa en simples creencias, creadas a partir de varias teorías o pseudociencias como el feng shui , en las que ha filtrado lo que ha querido para crear su propio método/creencia.
Afirma que su método te ayuda a adelgazar, afirmando que no es algo demostrable pero que cuando vuelve a ver a su clientes después de aplicar el método les encuentra más delgados y con una expresión mucho más alegre, tranquila … algo así como más Zen.
También afirma que mejora tu fortuna (economía), tus relaciones personales, tu carrera profesional, …etc. Un cúmulo de creencias que de verdad de la buena, no me creo para nada. El orden puede afectar en tu vida, pero pongo muy en duda que afecte en esa medida y en tantísimos aspectos de la vida.
Insiste en los vínculos emociones que creamos con objetos materiales y que debemos quedarnos solo con aquellos que nos hacen sentir felicidad. Sin usar términos muy trascendentales lo veo muy obvio, pero dar las gracias a cada objeto, tratarles (doblarlos y colocarlos) como si tuvieran sentimientos está basado en ideas espirituales y en una visión muy consumista y propia de una economía de mercado de la que prefiero no formar parte.
Habla de acariciar las prendas, de aportarles energía, de que esta energía las hace más duradera y de mejor aspecto… Pseudociencia en toda regla. Creencias sin base cientifica y contradictorias (por aportar alma a los objetos).
Más le valdría dirigir su foco de importancia en las propias personas y no en los objetos integrándoles alma.
Marie Kondo se pasa medio libro vendiendo su método
No exagero nada de nada. Se tira medio libro contando casos de éxito, ejemplos de clientas finalmente satisfechas, explicando todas las mejoras que conseguirás si aplicas su método, asegura que si llevas a cabo su método al completo jamás volverás a ordenar, te recomienda que olvides todo lo que has conocido, se apoya en que empezó a «formarse» en métodos de organización desde los 5 años de edad, que tiene muchísima experiencia y que eso avala su método…
Entiendo que quiera mostrar su eficacia con ejemplos verídicos, con ciencia… Pero no esa cantidad aplastante de una especie de buen Copywriting y Storytelling donde solo aburre una y otra vez. Aburre si usas filtros, por que si no estoy segura de que te convencerá.
No quiero basar mi felicidad en cosas materiales. Sí es cierto que puedes crear un mejor clima en tu hogar, eso es obvio, pero ¿Que tu felicidad se base en eso? No, gracias.
Después de aplicar el filtro al método KonMari
Realmente si filtramos su libro y nos quedamos con las técnicas útiles y prácticas podemos sacar algún provecho como los puntos que os compartiré. Unas 50 páginas como ya he comentado, serían suficientes.
Deshacerse de todo lo que no usas, no te gusta o no sabes por qué has guardado
Muchas veces tenemos cajones que solo usamos para meter cosas. En esos cajones los objetos entran pero nunca salen. Son pequeños objetos (Marie Kondo les llama komonos) que guardamos sin un sentido útil o realista. Botones, piezas sueltas, pendientes sin pareja, objetos estropeados… Estos deben deshecharse si no forman parte de nuestra vida como tal. Es simple, es algo que no echas en falta si lo tiras, que no necesitas guardar, que no te aporta absolutamente nada y ocupan un espacio útil.
En otras ocasiones se trata de ropa regalada que no nos ha terminado de convencer, o bien porque no es de nuestro estilo o bien porque no nos sienta como querríamos. El caso es que es ropa que no usamos, aunque nos guste mucho, no la ponemos por X o por Y, por lo tanto hay que donarla y perderla de vista. Cuando desheches toda esa ropa que no pones podrás decidirte de forma más eficaz sobre qué ropa te pondrás. Doy fé.
Si te cuesta, dudas y no sabes si deshacerte de algo…Marie Kondo te recomienda que te preguntes lo siguiente
¿Te hace feliz?
Uno de los consejos con los que intenta ayudarte a que te deshagas de muchas cosas es que te preguntes si te hace feliz. Que cojas el objeto en tus manos, uno,por uno (también la ropa) y que te auto-observes para saber si te hace sentir alegría y felicidad o si por el contrario, te aburre, te produce rechazo o simplemente te resulta indiferente. Lo que no te haga sentir felicidad ha de ser retirado, será un deshecho o algo para donar. De todas formas no se debe quedar en tu casa.
El orden por el cual debes deshacerte de las cosas y ordenar
Para llegar a conseguir esta jerarquía se basa en, por un lado aquellos vínculos emocionales que procesamos por ciertos objetos (y por otros menos) y por otro en mejorar la habilidad de deshechar que tanto nos cuesta adquirir de una forma gradual. Por lo tanto es muy lógico que empecemos por lo que menos «importancia» le damos, como la ropa, y terminemos por detalles de mucho valor sentimental como son las fotos, las cartas…etc. El orden que Marie Kondo recomienda es el siguiente:
- Ropa
- Libros
- Papeles
- Objetos varios (komono)
- Objetos emocionalmente conservados
La verdad que es una jerarquía, y un orden, útil y práctico.
Ordenar por categorías, no por ubicaciones
Es bastante cierto y necesario, ya que si lo hacemos por ubicaciones / habitaciones, probablemente nos encontremos con más ropa en otros armarios, más objetos variados en otros cajones, más calcetines en la sala de plancha, más y más cada día en distintas habitaciones. Un caos. La percepción de que «no tienes suficiente» o que «te puedes quedar sin algo» es bastante mayor si organizas por ubicaciones, porque no tienes en un mismo sitio todo lo que realmente posees. Junta en una misma habitación toda tu ropa , deshazte de la que no te hace feliz y ordena la ropa. Junta todos tus libros en una habitación, deshazte de los que no te hacen feliz, y ordenar los libros. Ídem con el resto de objetos de tu casa.
Esto también impulsa la motivación, se avanza de forma más rápida y no crees que estás constantemente con «cosas por hacer».
Cada cosa en su sitio y un sitio para cada cosa
Esta no es una teoría de Marie Kondo pero sí que es totalmente factible. Cuando cada cosa tiene su sitio sabemos con mayor claridad donde tenemos que volver a colocarla y nos resultará más fácil mantener el orden de forma práctica y rápida.
Sin embargo Marie Kondo recomienda no usar muchas clasificaciones o separadores y recomienda usar solamente cajas de zapatos. En esto discrepo bastante.
No existe una persona que le guste más el caos que el orden
Puede que sí, puede que no… Es esto también discrepo, pero en lo que sí que estoy de acuerdo – y Marie Kondo lo cuenta en su libro – es que a nadie le enseñan a ordenar, a ser ordenado. Esto significa que es una habilidad poco desarrollada en la mayoría de las personas pero que obviamente se puede trabajar y mejorar.
Pero si tu no quieres ser ordenada, que no es lo mismo que «no ser capaz» , pues es tu decisión. Creo que también se puede ser feliz entre el caos organizativo. Otra cosa es que queramos o que prefiramos que no sea así.
En definitiva, y personalmente, no te puedo recomendar el libro porque creo que perderás mucho tiempo. El 70% del libro no es nada útil y está lleno de creencias, pseudociencias, y teorías basadas en la experiencia de una persona obsesionada con el orden.
En su momento lo quise leer con mucha motivación, pero en las primeras páginas ya me transmitía una gran inquietud por el orden y un lenguaje muy centrado en creencias poco prácticas e irracionales sin fundamento real.
Te recomiendo por otra parte guiarte por sus técnicas base, como las que te he compartido o como las que podrás encontrar en otros muchos posts que resumen su libro, porque ahorrarás mucho tiempo.
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¿Conocías este libro? ¿Tenías ganas de leerlo? ¿Adoras el orden o prefieres no darle demasiada importancia? Cuéntamelo en los comentarios.
Belen Lopez ha dicho
Yo lo lei y no me convencio mucho, me gusta mas a una chica que sigo por instagram (tiene un blog) se llama orden y limpieza en casa .La chica se llama alicia y es organizador profesional, mudanzas, optimización de espacios, tiene un libro que se llama 21 días para tener tu casa en orden. A mi me encanta .
Mónica Lemos ha dicho
Te ha pasado como a mí, jeje!! siii verdad que hay gente que comparte cosas geniales? Gracias Belén!!! le echaré un ojo a esa cuenta, MUACK!
Andrea Goro ha dicho
(ÚLTIMO, PERDÓN POR LA EXTENSIÓN)
No me parece que merezca la pena pagar 15 euros por este libro, yo me hubiera gastado mucho menos (quizás la mitad o menos). Sin embargo, me deja con una buena sensación y he experimentado simpatía por la chica. No creo que tenga ningún trastorno, sino que comparte con el mundo un método que a ella le funciona y que ha ido probando desde que es muy chiquita. Se abre a sus lectores contándonos sus carencias y miedos. También nos repite a cada instante que no tiene un método científico y que esto no es un libro "serio" de organización. Te doy la razón en que habla demasiado de los éxitos de su método. Pero yo creo que en realidad este libro resume un curso que alguien podría hacer con ella. Quien no quiera realizar el curso (o no pueda, porque no esté en Japón) podrá leer este libro, teniendo un resumen de lo más importante y saber así los buenos efectos que ha tenido en la gente.
En definitiva, muchas gracias por habérmelo prestado y por haberme metido el gusanillo. Como siempre, te repito que me encanta tener amigas con las que aprendo cosas nuevas.
Ahora pasamos a otra cosa nueva, por ejemplo, la atención selectiva 😉
Un abrazo, guapa.
Andrea Goro ha dicho
(3 de 3)
Tampoco me tomo al pie de la letra lo de que al organizar tu casa la vida te va a ir mejor de manera automática, pero estoy de acuerdo con que si organizas tu espacio de trabajo y tu vivienda, tendrás que gastar mucha menos energía en lo que está a tu alrededor y podrás centrarte mejor en ti, en lo que sientes, en lo que te apetece hacer,… en lugar de estar pensando "ay, cuándo me pondré a organizar los libros y apuntes de la universidad…" Que dirás tú, Mónica, ¡menuda exageración, a mí el orden de mi casa no me quita el sueño! Pero hay personas que sí valoramos la paz que nos inspira el espacio alrededor. Por ejemplo, estoy segura de que mi madre deja de hacer muchísimas cosas que le apetecen por centrarse en tantas cosas que tienen que ordenar y tirar. Deberíamos hacerlo todo de un tirón, como la autora propone, para luego dedicarnos a vivir nuestra vida.
Yo he apuntado en una lista lo que me parece más importante de este método, lo que realmente sé que voy a aplicar y que me parece lógico/realizable. La mayoría coinciden con el resumen de tu artículo, pero creo que cada una debe hacer su propia lista para interiorizar mejor las ideas (como cuando haces tus propios apuntes para estudiar, aunque tu amigo te haya prestado los suyos). Por supuesto, al igual que tú, he pasado el filtro.
Andrea Goro ha dicho
(2 de 3)
Por otro lado, al principio me chocó lo de TIRAR/DESECHAR igual que comenta arriba Bea. Yo creo que hay que obviar esto y pensar que en lo que se refiere es a decidir deshacernos de algo. Luego ya lo que hagamos con estos objetos (donar, vender de segunda mano, reciclar, etc…) es otra cosa (sería otro libro aparte). No creo que esta chica esté de acuerdo con tirar algo que puede tener un uso. Al revés, me parece una persona bastante minimalista que lo que logra en nosotros es que dejemos de consumir y comprar compulsivamente. Además, su mascota favorita es el Niño del Bosque que promueve el respeto por el medio ambiente y la utilización de energías renovables, haha. (Lo digo por la camiseta que todavía utiliza desde 2005).
Por mi parte, hay cosas que aplicaré y otras que no. La chica tiene buenísimas ideas (por ejemplo, algo tan estúpido como lo de las moneditas… Las he sacado del bote y las he puesto en mi cartera y en tres días ya me deshice de ellas en la panadería y copistería). Lo de dotar de alma a las casas y objetos no me lo tomo al pie de la letra pero comprendo y comparto el trasfondo. Yo lo que leo entre líneas es que cuando nos sentimos agradecidos por las cosas que nos rodean y las cuidamos, inevitablemente estamos viviendo de una manera más feliz y consciente.
Andrea Goro ha dicho
(1 de 3)
¡Holaaaa! Bueno, ahora ya puedo hablar con conocimiento de causa, hahaha.
Tienes toda la razón cuando dices que exagera dotando de alma a los objetos. De todas maneras, no me sorprende, pues he estado más en contacto con la cultura japonesa en los últimos años porque me interesa y porque tengo un amigo japonés viviendo en Osaka con quien intercambio muchas ideas y pensamientos. También en el documental Ama-San que vi en el festival internacional de documentales de Tui me dio esta impresión: tienen un montón de rituales y le dan un montón de importancia a los procesos que realizan, por ejemplo, para pescar el marisco, etc… Son muy diferentes a nosotros. Yo creo que esto se refleja mucho en el libro 🙂
Hay muchas cosas con las que no estoy de acuerdo, por ejemplo, lo de deshacerse de los libros que guardo para leer algún día, ¿estamos de coña? ¡por esa regla tiraría todos los libros de la casa de mi abuelo y lo considero una biblioteca sagradísima y gratuita por la que me siento enormemente agradecida! 🙂
Mónica Lemos ha dicho
Jajajaja si Bea, sus ejemplos a veces son de aúpa… Y también es cierta la parte de deshechar sin rehusar.. No propone alternativas y yo tampoco lo he hecho, pero la verdad es que lo mejor sería donar o regalar si realmente no vas a rehusar… Yo tengo un montón de cosas guardadas para "hacer manualidades" y rehusar que al final acumuló más que rehusó… Hay que ser prácticas! Reciclaje y listo. Ni la más pro del rehuso guarda y rehúsa toda la basura que produce. O por lo menos yo no me lo creo, sin evidencias.
Yo ya comento que hay muchos posts en la web con resúmenes del libro que recomiendo más que su libro, primero por lo que cuesta el libro (14,95€) y segundo pprque más de la mitad del libro se lo pasa vendiendo e inventando sin evidencias.
Un saludo y muchas gracias por tu comentario 🙂
Muack!
Bea López ha dicho
Hola!! Yo si me he leído el libro y la verdad es que me gustó la filosofía que explica (aunque para ser sinceras no la haya puesto en práctica). No hay que tomar todo el libro al pie de la letra pero tiene sentido la parte en la que dice que tenemos que quedarnos en casa con aquellas cosas que nos gustan y nos hacen feliz.
Un ejemplo en mi caso: Tengo la alacena llena de vasos de nocilla con minions o pitufos. No son los vasos que me gusta ver en mi mesa, pero me da pena tirarlos, ya que creo que es derrochar. Sin embargo Marie Kondo me diría : tiralos y compra solo 6 vasos bonitos que te gusten.
Creo que tener pocas cosas pero tener esas cosas que se identifiquen contigo tiene sentido, de una manera más allá del orden, para hacerte sentir bien.
Por otra parte, una cosa que no me gusto de esta filosofía es la poca importancia que le da al reciclaje y al re-usar las cosas que no necesitemos. Habla de desechar cosas casi en el 50% del libro, y en ese punto, es cuando difiero y creo que hay un punto medio entre cambiar todas las cosas que hay en tu casa por "cosas bonitas", y re-usar cosas que están bien y/o son prácticas aunque no te gusten tanto (de ahí que siga sin tirar los vasos de los minions).
En resumen, es un libro que recomendaría porque da ciertas pautas para enfocar el orden y la armonía en tu casa, pero como dice Mónica, siempre con filtros. En uno de los primeros ejemplos que habla en el libro comenta como una clienta suya empezó a desechar tantas cosas que terminó por divorciarse :O
Un saludo!
Mónica Lemos ha dicho
Genial Andrea! Podremos contrastar nuestros filtros, y comentar con qué nos quedamos. Personalmente nunca le he dado demasiada importancia al orden hasta hace poco, y ya estoy manos a la obra y se notan los cambios de hábitos, cuando una quiere..jajaja
Gracias por tu comentario maja
Muack
Andrea Goro ha dicho
¡Hola! Conozco el libro y sí, tengo ganas de leerlo 🙂 Yo le doy mucha importancia al orden pero… eso de ponerle alma a los objetos, no me parece demasiado lógico. Al contrario, para ser más feliz deberíamos desvincularnos lo máximo posible de ellos, ¿no? ¿Y cómo desvincularte de ellos si te crees que tienen sentimientos? Pero en mi caso sí que se cumple eso de que cuanto más ordenado esté el espacio donde habito o donde trabajo o donde festejo (cualquier momento) más en paz me siento y más agradable me resulta. Igual que cuando tomo apuntes, no me gusta verlos feos o torcidos, me tomo el tiempo de subrayar, utilizar colores, etiquetas,… Eso también es ser ordenada. A mí sin duda me afecta en una casa, al igual que el olor, la cantidad de luz,… Pero claro, ¡cada persona es un mundo!
Ya te contaré si al final me animo a leerlo entero o, al menos, una parte!! Abrazos
Mónica Lemos ha dicho
Jajaja, me alegro que no hayas gastado dinero en él, y que mi post haya hecho su función.
Realmente en según qué circunstancias el orden no es prioridad. Por ejemplo con la llegada de un nuevo miembro de la familia, porque lo primero es la salud y el bienestar de la familia, para ello es primordial el descanso y la satisfacción de las necesidades primarias, entre las que destacó el ocio. Si después queda tiempo para ordenar pues genial, no?
Gracias por tu comentario 🙂
Lédif Torres ha dicho
Hola Mónica, agradezco muchísimo tu reseña.
Mira lo que me pasó (extraigo de tun texto):
"En las primeras páginas ya me transmitía una gran inquietud por el orden y un lenguaje muy centrado en creencias poco prácticas e irracionales sin fundamento real"
¡Tal cual!
Si yo lo que quiero es ordenar eficazmente mi casa porque soy madre de dos bebés, tengo un emprendimiento en horno y sé que cuando las cosas están en su sitio me siento más tranquila para sentarme a producir. Sin esa sensación de "me falta hacer X cantidad de cosas"
Pero, qué va. Mientras más avanzaba en la lectura más mareada me sentía con forma tan repetitiva de decirnos lo exitoso que es su método.
Así que ahora me quedo con tu resumen y manos a la obra.
Por cierto, me alegro muchísimo de no haber comprado el libro. Lo estaba leyendo online 🙂